Lucie y yo conectamos muy rápido, las dos nos encontramos en una situación parecida y creo que eso es lo que nos hizo encontrarnos.
Tras la caminata del primer día por Sajama decidimos quedar para la mañana siguiente e ir a la Laguna, las aguas termales, el bosque de Queñuas, el mirador.... Queríamos hacerlo todo! Ja ja ja ja...
Supongo que las dos sentimos lo mismo. Al viajar sola, muchas veces crees que las personas no te entienden (ya lo crees en la vida diaria con la gente que te conoce bien imaginaros viajando). Durante tantos días de viaje, llegas a conocer a muchisima gente pero no siempre con afinidades. Cada uno tiene sus razones, ideas, objetivos, creencias, metas..., diferentes motivos por los que viajan. Es difícil encontrar a alguien igual a nosotros. Hay quien viaja por decir "Yo he estado aquí " y hay quien vive realmente el lugar y piensa "Yo quiero volver aquí ". En mi caso puedo decir que soy del segundo grupo. Me gusta saber sobre el lugar que visito y conocer la vida diaria de la gente local.
Viajar me da vida, conocimiento y me abre la mente.
Lucie es de esas personas que sienten y piensan como yo.
La verdad es que nos confiamos muchas cosas en muy pocas horas y lo mejor de todo es que nos entendímos. Lloramos, reímos y pasamos horas andando sin hablar con un silencio que no incomodó a ninguna de las dos, más bien lo agradecimos, realmente lo que necesitabamos en ese momento era eso. Saber que si necesitas hablar tienes con quien hacerlo. Como digo muchas veces, es bueno tener un momento a solas pero a la vez estar acompañada.
Creo que nos encontramos con personas a lo largo de nuestra vida que tienen un propósito al cruzarse en nuestro camino al igual que nosotros en el suyo, en este caso Lucie yo nos encontramos por el mismo motivo.
Bueno ya dejo mis reflexiones y os dejo unas fotos que sé que es lo que estáis esperando.
Durante el regreso de la Laguna se cruzó un solo vehiculo, y justo se paró a preguntarnos dónde estaban las aguas termales.
Lucie y yo nos miramos como diciendo "Si ellos son de aqui, porque nos preguntan a nosotras ?"
El caso es que eran unos trabajadores de La Paz que regresaban y no habían estado nunca.
Les indicamos dónde era ( nosotras también ibamos hacia allí ) y muy amablemente les dijmos si nos podian acercar un poco.
Fueron igual de amables y nos llevaros hasta la entrada que teníamos indicada. ( Viajar con el maps.me es una maravilla, lo marcas todo y listo, luego solo hay que mirar los puntos.)
Unos 20 minutos más seguimos andando y llegamos....
Teníamos que pasar una valla de alambre que delimitaba la propiedad de Franklin.
Perdón, no les hablé de Franklin. Era el conductor del mini bus de Patacamaya a Sajama y quién me dió alojamiento. Él me indico el lugar de las aguas termales ya que estan dentro de su propiedad y hay que pagar. Al estar alojada en una de sus habitaciones tenía entrada gratis... y al final Lucie también... je je je
De nuevo increíble! Que vistas, que lugar, que maravilla, que agua.... Que momento...
Nos quedamos un buen rato, hasta que empezaron a venir unas nuves y pensamos que era el momento de irse.
Nos vestimos y nos fuimos camino al mirador.
Estabamos tan cansadas que no teníamos claro si ibamos a subir, nos miramos una vez más y una lo pensó y la otra lo dijo: "vamos andando y decidimos cuando estemos mas cerca" 😂
Seguimos andando y en el cruce del Bosque de las Queñuas nos decidimos.
Antes de contaros la decisión, deciros que el Bosque de Queñuas es un bosque de arboles muy curiosos. Es el único árbol que sobrevive a más de 4.000 m de altitud. Le llaman el luchador incansable de los Andes.
La decisión final fué atajar por medio del bosque y subir directas.
A Lucie le costó un poquito pero llegamos, tampoco teníamos prisa.
Fué un día tranquilo, relajado, lleno de imágenes preciosas... Todo para guardar en mi mente, en mi recuerdo, en mi retina...
Hay lugares increíbles en todo el mundo, pero os aseguro que estoy viviendo algo nuevo, algo distinto, algo que me esta dejando realmente facinada.
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