Día 2 ... Balicasag 

Una  pequeña vuelta para conocer las cuatro calles que tiene la isla. Si se da la vuelta por la orilla en 25 min,  os aseguro que en 5 min la cruzas en línea recta. Tanto la primera opción como la segunda son fantásticas.... Andar por la orilla y dar la vuelta tranquilamente te relaja, se agradece la tranquilidad, el silencio roto unicamente por las olas del mar lal tocar la arena de la orilla.... Y si cruzas por el interior , te llegas a encontrar como mucho un par de cruces,  no hay perdida si lo que quieres es llegar al Hotel rapidamente. Este camino sorprende, en tan solo unos metros encuentras la escuela, la iglesia y un par de tiendas dónde comprar algo de fruta. A diferencia del camino de la orilla,  en el interior siempre  se escucha algo... Si no es un grupo de niños corriendo o jugando es el  el sonido que producen  los cantos de los gallos...

La Iglesias de la isla. Según lo que entendí, solo hacen misa una vez al mes. Así que bastante bien conservada tanto por dentro como por fuera teniendo en cuenta el poco uso que hacen de ella. 

Bueno, después de un corto paseo (no por no querer andar sino porque no hay dónde ir... Je je je je je) Nos compramos un poco de fruta  en una de esas dos únicas tiendas que encontramos en el interior.  La comida  aquí en Filipinas deja mucho que desear así  que... comer un poco de fruta nos va a sentar de lujo... Vamos a dejar el arroz,  los sandwiches y los noodles para otro rato.

Rosa peleandose un poco con la piña! Pero puede con ella!..